Muchas familias acuden a terapia de comunicación no violenta porque intuyen que algo no funciona bien y sienten que la comunicación juega un papel fundamental en ello.
Ayudarles a descubrir sus necesidades y a valorar soluciones que les cuiden a todos sin descuidar a nadie, desde la honestidad y la empatía es uno de los trabajos que más me enriquecen.
La comunicación no violenta en sesiones familiares aclara muchas incertidumbres, y mejora de forma muy visible la relación dentro de la misma y de la familia con su entorno.
En definitiva, será un espacio en el que trabajaremos juntos para regenerar la conexión entre vosotros, acortar la distancia que pueda existir y promover un mayor entendimiento mutuo y la búsqueda de un bienestar común.
En cada familia existen diferentes relaciones interpersonales, con pautas de comunicación que no siempre son las más convenientes. Muchos de nosotros tenemos dificultad para expresar nuestras opiniones de manera abierta y natural, mostrar desacuerdo, pedir ayuda… sin que esto nos lleve inevitablemente a la discusión y el conflicto.
Todo ello nos conduce a una falta de entendimiento con las personas que más queremos, y en consecuencia, a mantener relaciones que no son satisfactorias.
Poder entender al otro, comprenderlo, y gestionar los conflictos a través de nuevas herramientas de comunicación es un gran paso para tener una vida familiar sana y honesta.
En este aspecto, la Comunicación No Violenta aclara muchas dudas y mejora notablemente la relación dentro de la familia y en su entorno, y en concreto, en las Sesiones Familiares de Comunicación No Violenta, cada miembro de la familia aprenderá cómo actuar ante las dificultades para crear un modelo que responda a sus propios valores.
La mejor forma para llegar a conocer a nuestros hijos es conociéndonos a nosotros mismos, y te lo dice Elena Diéguez también desde su propia experiencia. El trabajo personal de autoconocimiento como padres, hace más fácil la tarea de observar y abrirse al maravilloso camino de descubrimiento acerca de quiénes son nuestros hijos.
Y para ello es importante conocer las necesidades que tenemos como padres, para poder comprender mejor las necesidades de nuestros hijos. Todos tenemos necesidades comunes, pero no siempre se despiertan en cada uno de nosotros las mismas al mismo tiempo (puede que nuestro hijo tenga una necesidad de diversión y, en ese momento, nosotros tengamos una necesidad de descanso).
Aprender a identificar estas necesidades, para todas las partes implicadas, y entender que nuestras prioridades no siempre son las mismas que las que tienen nuestros hijos es un buen punto de partida para comenzar a trabajar. Discusiones, rabia, enfado, culpa… son algunas de las emociones que aparecen cuando no nos ponemos de acuerdo. Y esto sucede, muchas veces, porque no nos conocemos.
El autoconocimiento no solo nos sirve para gestionar mejor nuestros conflictos internos, sino que nos ayuda a ser más empáticos y abiertos con nuestros hijos.
Las tareas escolares suponen un motivo de preocupación frecuente en la mayoría de las familias. Algunas veces, en el afán de que nuestros hijos obtengan buenas calificaciones, los padres nos empeñamos en hacer todo lo posible para “ayudarlos”.
Es aquí donde suelen aparecer las discusiones. Dejamos de escucharlos y terminamos imponiéndoles lo que nosotros creemos que es lo mejor para ellos.
A su vez, muchas veces tampoco logramos estar de acuerdo con nuestra pareja acerca de lo que consideramos que es más conveniente para nuestros hijos. Entonces, se crea un bucle de conflictos que se repiten una y otra vez, y del que nos resulta casi imposible salir.
En este sentido, es importante entender que nuestra tranquilidad y nuestra propia valoración personal, no deberían depender de las calificaciones que obtengan nuestros hijos.
Ante estas dificultades, incorporar nuevos recursos de comunicación que nos permitan relacionarnos de una manera clara y comprensiva con ellos, nos brindará la posibilidad de cambiar patrones que no nos han dado resultado hasta el momento.
En Comunicación No Violenta Sesiones Familiares encontrarás estrategias para conectar mejor con tus hijos, aprenderás a escuchar sus necesidades y a tomar mejores decisiones que os cuiden a todos.
La utilización de la Comunicación No Violenta en Sesiones Familiares es una experiencia enriquecedora para toda la familia. En ella, los distintos miembros de la unidad familiar, obtendrán nuevos recursos para mejorar su convivencia y podrán:
Todo este aprendizaje es posible gracias a las Sesiones de Comunicación No Violenta en familia y, por supuesto, a través de las formaciones que ofrecemos en nuestra Escuela Conecta y Comunica.
Este acompañamiento basado en Comunicación No Violenta en Sesiones Familiares se puede realizar en horario de mañana o de tarde, ya sea de manera online, o de forma presencial en Zaragoza.
Una propuesta que brindará a tu familia la oportunidad de crear un vínculo sólido y respetuoso
Pide cita para una sesión inicial de valoración en la que Elena Diéguez podrá recomendaros la mejor forma de abordar la situación en particular de vuestra familia…
Comunicación No Violenta como herramienta terapéutica en sesiones y formación online